Recepción de la Normal: lo insólito y qué dice el contrato del servicio gastronómico  

Lejos de acallarse, a medida que pasan las horas los ecos del escándalo vivido en la recepción de los alumnos de la Escuela Normal van creciendo y surgen más interrogantes -algunos insólitos-, que desnudan un gran negocio para “unos pocos vivos”.

“Pagamos como 7 mil pesos y nos morimos de hambre, teníamos que rogarles para que nos traigan algo”, “la recepción estipulaba de todo un poco y apenas trajeron unas bandejitas con fiambres malísimos, hasta un salchichón que ni los perros podían comer”, “recién cerca de la una de la madrugada después que los padres reclamamos apareció el plato principal que nada tuvo que ver con lo que decía el contrato, tampoco el postre y ni hablar la bebida”, son algunos de los comentarios vertidos a nuestras redes sociales y al celular de contacto directo (3496 - 534414) de este portal por padres que fueron parte este sábado de lo que califican “una estafa”.

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Cosas que no cierran 

El 9 de junio de este año Hugo Belisario Baigorria y Luis María Marconetti firmaron un contrato como prestadores del servicio gastronómico, al que adhirieron varios padres de los estudiantes en nombre de todo el grupo de alumnos.

Sorprende que a nadie le llame la atención que el acuerdo haya sido con estas dos personas y en ningún tramo se mencione a qué empresa representan… Es más, según la documentación en poder de este medio, en ningún lado figura un lugar físico, una dirección, donde reclamar o consultar alguna duda. Sólo aportaron una cuenta a nombre de Marconetti para que depositen el dinero.

Ayer trabajamos todo el día en el tema con varias cuestiones que nos limitan, como ser todos los organismos públicos cerrados, pero además nos resultó imposible encontrar antecedentes fidedignos respecto a que en la actualidad Baigorria y Marconetti se dediquen al rubro por el cual cerraron un negocio millonario: uno de ellos se muestra vinculado a un familiar que promociona un pequeño cotillón y tendría suspendido el CUIT, mientras que el otro hombre, aparentemente, para el Estado sería… un monotributista dedicado a fabricar aberturas.

Tras no poco esfuerzo pudimos saber que en enero de 2013, junto a una mujer, Marconetti creó Servicios Integrales de Alimentación, con domicilio en Boulevard Gálvez 1525 de la ciudad de Santa Fe, aunque este domingo no pudimos dar con él.

Seguiremos intentándolo, aunque esta firma comercial hace años ya no le pertenecería. Es lo más cercano que pudimos relacionarlos como proveedores de eventos masivos… Poco y nada.

Otro de los tantos puntos oscuros que sorprende es que se hayan comprometido a atender una velada de primer nivel sin tener una infraestructura acorde, ya que alquilaron prácticamente todos los enseres a dos empresas de la ciudad... Las que hasta anoche, además de las cuantiosas pérdidas en cuanto a la vajilla, no habían cobrado ni un centavo (ver nota aparte en la página web).

Por supuesto ambos cuentan con espacio para dar a conocer su versión y presentar documentación que avale su vínculo con alguna empresa dedicada a atender veladas como la vivida en el salón del Cicae. ¿Se unieron para este evento o realmente se dedican a este rubro?

Entretelones 

Dejando de lado los errores ortográficos que tiene el texto donde sellaron el acuerdo entre las partes -los corregimos para que pueda entenderse, pero daría la sensación que al momento de escribir “estaban demasiado apurados” o lo que sería peor, directamente algunas cosas ni saben cómo se llaman-, pasemos a lo que se comprometieron a servir durante la velada.

“Los prestadores se comprometen a realizar la provisión y disposición de los elementos necesarios para la ubicación de los concurrentes, como así también los artículos necesarios para que realicen el consumo de los alimentos y bebidas suministradas por el personal asignado para tal fin”, reza el escrito.

Más adelante van a lo específico: “RECEPCION: bocaditos agridulces, tarteletas de palmitos con salsa golf, tarteletas de queso crema y champiñones, bruschettas de queso azul y nuez, bruschettas de jamón ahumado y oliva, sándwich de miga (jamón y queso), empanadas de carne y pinchos de verdura.

PRIMER PLATO: tabla de fiambres y quesos con panes caseros, cazuela de verdura y cazuela de salchichas.

FLATO PRINCIPAL: bondiola de cerdo salseada con crema de champiñón, jamón cocido y verdeo; guarnición, papas rústicas/canoa y vegetales rústicos.

POSTRE: brownie de chocolate con helado de crema americana y salsa de frutos rojos.

TRASNOCHE: Pata flambeada con panes saborizados y salsas varias o sándwich de carré de ternera, sándwiches mixtos y variedad de pizzas.

BEBIDAS (toda la noche, desde el primer plato hasta 30 minutos antes de la finalización del evento): gaseosas línea Coca Cola, agua mineral con y sin gas, cervezas Santa Fe, Schneider, Quilmes, Brahma, vinos línea Alma Mora (Malbec-Chardonnay), champagne para brindis (una copa por asistente).

BARRA DE TRAGOS (desde el inicio del trasnoche hasta 30 minutos antes de la finalización): cerveza en latas 330 Santa Fe, Schneider, Quilmes y Brahma, Fernet Branca, Gin Tonic, Gancia, Cuba Libre, Vodka, Campari y gaseosas”.

Sobre los costos, aclaran que son valores a junio de este año y luego describen: “Por persona, mayores $ 4.800, menores $ 2.400 y trasnoche $ 3.600”.

Cómo sigue 

Si fue un error de gente inexperta o si se trató de algo pensado “desde el vamos” deberá aclararse en la Justicia, por eso es vital que los padres denuncien, de lo contrario, todo quedará acá.

Asimismo, vale aclarar que la fiesta finalizó en un caos porque ante semejante situación varias personas fueron a apoderarse de distintas bebidas por su cuenta.

De nuestra parte seguiremos de cerca el tema, iremos sumando novedades y, como siempre, usted se enterará antes que nadie por el portal líder de la región.