Polémicas acusaciones del cura que marchó en defensa de un preso por abuso

Un grupo de vecinos apoyados por el sacerdote Jorge Montini marchó el viernes para exigir la prisión domiciliaria de Miguel Marchisio, el médico preso por abuso sexual a dos pacientes menores de edad. Todos los detalles.

Tal como contó Esperancino.com.ar, en San Jerónimo Norte hubo una marcha de vecinos allegados a la familia de Miguel Marchisio, el médico que permanece en prisión preventiva, imputado por abuso sexual simple y abuso sexual gravemente ultrajante cometido contra dos pacientes, ambas de 16 años.

Desde su círculo cercano argumentan que es inocente por ser “un hombre de bien, un padre de familia”, sin embargo hasta sus propios abogados habrían reconocido en la última audiencia que uno de los abusos ocurrió, aunque no estaban de acuerdo con la calificación legal del hecho, es decir solo una cuestión técnica.

De la marcha participó y fue uno de los impulsores el párroco de esa ciudad del Departamento Las Colonias, Jorge Montini.

Al no haber misa, el sacerdote se comunica con los fieles por la radio y televisión locales y en las últimas horas utilizó esos medios para referirse al tema, dejando polémicas declaraciones.

“Lo que escribieron detrás del Cristo, en la pared de la Parroquia (NDR: se refiere a una pintada que dice “Marchisio abusador, Iglesia cómplice”) movió a muchos a respaldar mi gestión, mi tarea, a apoyarme en esta lucha contra una dictadura”, comenzó diciendo el cura, en un discurso más político que propio de una misa.

“Tuvimos la dictadura militar, terrible, los que la sufrimos en carne propia sabemos cómo fue, y esta es la dictadura del feminismo, de los que están a favor del aborto”, agregó comparando el movimiento social con uno de los episodios más tristes de la argentina.

El clérigo continuó diciendo que “ellos pueden destruir nuestras iglesias, manchar nuestras catedrales, salir con la teta al aire, despreciarnos y hacer las burlas que se les ocurra y nosotros, argentinos libres, no podemos hacer una marcha, por eso estamos frente a una dictadura”.

Montini pidió que “el pueblo piense que hay detrás de todo este caso” y expresó que “Marchisio está preso hace dos meses y desde ahí me pedían hacer una marcha. A él lo visité como a muchos otros presos. Esperaba que la Justicia hiciera algo, pero cuando uno ve esa pintada, cuando uno ve lo que un diario esperancino está publicando (si se refiere a este portal líder en información y visitantes le contestamos que siempre publicamos los datos oficiales y no nos vamos a callar porque no tenemos compromisos con nadie), uno dice acá hay plata detrás, acá hay poder político detrás, acá hay otras cosas”.

El cura disparó todas esas acusaciones resonantes sin dar ningún nombre o motivo.

“No nos dejemos dominar por la dictadura del feminismo, soy el primero en estar a favor de la mujer, sus derechos y su defensa. Y nadie puede decirme que soy un encubridor de abusos. Fui el primero del mundo que denuncié a un obispo, lo hice sacar y lo denuncié ante la Santa Sede, 12 años esperé para que la Santa Sede se de cuenta que este obispo era un corrupto”, manifestó en clara alusión a ex arzobispo fallecido Edgardo Storni, involucrado en graves delitos sexuales.

Luego Montini desnudó la corrupción y el encubrimiento que existe en la Santa Sede, el gobierno central de la Iglesia: “Cuando la Santa Sede me pidió perdón por no haberme escuchado, me prometió cargos para que yo me callara y no vaya a la Justicia, el cargo de obispo, pero le dije que no, que a mí no me compran con cargos.

Me aguanté que todos los amigotes de Storni digan que soy un loco y que a los pocos meses me manden a San Jorge, al fondo de la diócesis”.

“No solo ese abuso denuncié, a un juez de San Jorge lo hice sacar por esto mismo”, agregó el sacerdote.

Y en el final apuntó contra el gobierno local. “Lo que mas me entristece es la ausencia del intendente de la ciudad, que cobardemente no solo no apoyó esto siendo el responsable del Centro de Atención Municipal -lugar donde habrían ocurrido los abusos- que tenía que presentar un informe que le pedía el fiscal, no lo hizo y por eso este médico la pasó tan mal que está en grave riesgo su salud”, declaró el párroco.

“Denuncio la ausencia y cobardía del intendente y se lo dije a él también. Mi actitud será hostil, no me compran con dinero o con palmadas. Dentro de la Municipalidad hicieron cosas de la dictadura del feminismo para que este médico esté preso”, agregó otra vez sin dar nombres ni precisiones.

“Si dejamos avanzar esto, sus hijas, sus hijos y nietos van a ser las peores víctimas del proaborto, de este acusar a cualquiera sin basarse en la realidad o mejor dicho porque alguien le puso plata para que no lo denuncien a él, un cierto pastor por ahí.

No le tengo miedo a ningún juez, a ninguna cárcel porque voy en nombre del señor. Denuncio a los que se declaran católicos y no hacen nada”, concluyó Montini alzando su voz.