El médico Miguel Ángel Marchisio permanece detenido en prisión preventiva tras haber sido imputado por abuso sexual simple y abuso sexual gravemente ultrajante.

Delitos que, según la Justicia, cometió contra dos pacientes de 16 años en el Centro de Atención Municipal de San Jerónimo Norte (CAM).

Uno habría ocurrido en noviembre del 2019 y el otro en diciembre del mismo año.

Tal como contó en ese momento Esperancino.com.ar, la detención se produjo el 26 de junio de 2020 tras dos allanamientos: uno en su casa y otro en el CAM.

El párroco

Numerosas veces sus abogados defensores intentaron que recupere la libertad, incluso hubo una marcha encabezada por el polémico párroco Jorge Montini, que involucró en el caso al feminismo y habló de “dictadura”, además de confesar los turbios “manejos” de la Iglesia católica.

Pese a todo esto, debido a los indicios reunidos por el fiscal Alejandro Benítez y a los testimonios de las víctimas, el juez se negó en todas las oportunidades y dispuso que siga preso.

Comunicado

Ahora, un “grupo de vecinos de San Jerónimo Norte” presentó en los tribunales un texto dirigido a los jueces en el que vuelven a exigir que el imputado sea liberado. Además entre otras cosas hablan de “sentencia parcial y descalificada”, apuntan contra el fiscal, desconocen a una de las menores de edad que denunció al profesional y en todo momento ubican a Marchisio como supuesta víctima «del sistema».

Asimismo el texto enviado a los medios no tiene ninguna firma, por lo que se da por descontado que en realidad se trata de sus familiares y allegados.

A continuación compartimos el documento de manera textual y queremos conocer su opinión al respecto:

Señores jueces penales:

Representamos a un grupo de vecinos de San Jerónimo Norte afectados por la detención policial desde el pasado 26 de junio del Dr. Miguel Ángel Marchisio, médico de nuestra localidad y por cuya causa la comunidad se movilizó solicitando la colaboración de las autoridades políticas locales para el otorgamiento de la prisión domiciliaria ante su delicado estado de salud y hasta tanto se realizara el correspondiente juicio.

Este pedido se efectuó el viernes 28 de agosto del presente año y fue difundido por distintos medios de comunicación locales y de la región, con una importante adhesión y apoyo de parte de sus respectivas audiencias y lectores.

En esta oportunidad nos dirigimos a Uds. ante la constante similitud de procesos en contra de supuestos abusadores en los que no se ha permitido desarrollar la prueba o no se ha estudiado correctamente la producida en las carpetas judiciales. Y se han seguido absolutamente las pretensiones de los fiscales desatendiendo las situaciones reales de cada caso, transformando al proceso en una angustia para el justiciable y una venganza de la supuesta víctima.

Este accionar nos retrotrae a los primeros procesos inquisidores que nuestro derecho actual pretende erradicar, produciendo en sí mismo una inconstitucionalidad de los procesos porque precisamente se violan expresas normas de nuestra Constitución, Provincial y Nacional.

Los fiscales (son los antiguos jueces de instrucción), arman los procesos y desechan y/o producen a gusto las pruebas reunidas sin resguardo jurisdiccional.

Y el juez acepta esos procedimientos, los avala, y continúa sin estudiar absolutamente nada hasta concluir en una sentencia parcial y descalificada.

Pretendemos una Justicia segura en sus investigaciones y no arcaica como la que estamos recibiendo dado que en definitiva el procedimiento acusatorio nada bueno ha traído y es más injusto que el reformado sistema anterior, con la gravísima consecuencia para el denunciado de estar detenido y está detenido prácticamente desde el primer día esperando la condena.

Sin otro motivo, agradeciendo desde ya vuestra atención a la presente, saludamos atentamente.