El Departamento de Relaciones Policiales informó que un joven esperancino de 19 años que cuenta con amplios antecedentes fue detenido por ingresar a un domicilio, aparentemente con intenciones de robo.
El hecho ocurrió ayer por la tarde en San Martín al 800, barrio Sur, donde un vecino encontró al sujeto en su patio y al verlo este se dio a la fuga, dejando abandonada en la vereda una bicicleta de dama.
Minutos más tarde fue detenido por el Comando Radioeléctrico de la Unidad Regional XI.
Amaya y la “jugada” para intentar zafar
A diferencia de otros medios que copian y pegan el comunicado oficial, Esperancino.com.ar averiguó más detalles con los ciudadanos de la cuadra y pudo saber que el detenido es uno de los famosos mellizos Amaya.
Si bien ambos habían quedado en prisión preventiva por numerosos delitos, las leyes vigentes facilitaron que en un par de meses recuperen su libertad.
Como rasgo característico, los testigos describieron que tenía una cicatriz en la cara.
Cabe recordar que “El Melli” fue internado tras recibir una puñalada debajo del ojo en un episodio ocurrido en barrio La Orilla a mediados de 2019.
Lo insólito de la situación que se vivió ayer es que, tras la detención, un familiar de Amaya, que al parecer se enteró de lo sucedido, convocó a la policía a su casa de barrio Los Troncos y denunció que autores desconocidos habían robado la bicicleta de dama que quedó abandonada en la vereda del vecino de San Martín al 800.
Los efectivos lo interpretaron como una “jugada” para que el malviviente tenga una excusa por haber sido visto en un domicilio ajeno y así poder zafar, aunque de todas maneras la denuncia será investigada por protocolo.
Triste realidad
Según pudo averiguar este portal líder en información y visitantes, el hecho que le atribuirían a Amaya es “violación de domicilio”, ya que no se llevó nada y para la Justicia será muy difícil probar que podría haber sido un intento de robo.
Su abogado defensor podría decir que se escondió en ese lugar para escapar de alguna situación violenta o utilizar algún otro argumento que le permita seguir en libertad.
Lamentablemente son las leyes que rigen actualmente y quienes tienen la potestad de cambiarlas no son los fiscales ni jueces, tampoco los intendentes, gobernadores ni presidentes, sino los senadores y diputados, tanto provinciales como nacionales.