La obra del Gasoducto Gran Santa Fe continúa su curso con la colocación de la cañería, que pretende conectar casi 48 kilómetros y en un futuro permitir que vecinos de las localidades del área metropolitana de la capital provincial como Recreo, Esperanza, Monte Vera, Ángel Gallardo, Arroyo Aguiar, San José del Rincón y Arroyo Leyes, cuenten con el servicio de gas natural.
Según los últimos datos brindados por fuentes del Enerfe, la tubería ya está a la altura del parque industrial de Esperanza, en el extremo oeste del mismo y ya se completó el 50% de cañería enterrada o lista para dirigir bajo tierra. Esta obra cuenta con un plazo de ejecución previsto antes de fin de año.
Más allá del trabajo en tierra que avanza a un buen ritmo la incertidumbre se genera entorno a lo que sucederá con el cruce de los caños por debajo de la laguna Setúbal. Como informó El Litoral hace unas semanas atrás, el repunte del río Paraná -que hizo crecer el agua hasta más de 4 metros en el Puerto Santa Fe- hizo que el terraplén que se construyó en la costa de El Chaquito quede bajo agua.
Esta semana, un equipo de El Litoral recorrió el lugar para precisar las condiciones actuales de la plataforma desde donde se espera que la máquina encargada de la Perforación Horizontal Dirigida (PHD) para el Gasoducto Gran Santa Fe haga base. Con una altura de 3,22 metros en el hidrómetro local, la plataforma ubicada en la cota 12 apenas asomaba (ver foto). Mientras que el camino que conecta esta base con la playa permanece bajo agua.
El Litoral consultó fuentes de Enerfe sobre cuáles son los pasos a seguir en las próximas semanas. «Va a estar llegando maquinaria pesada para la preparación de la pista, va a haber movimiento en las próximas semanas en torno a la zona de cruce», informaron. Desde este organismo del gobierno provincial se mantienen expectantes y esperan que el nivel de la laguna descienda en las semanas siguientes, tal lo pronostica el Instituto Nacional del Agua (INA).
Sobre las condiciones que debe presentar la plataforma al momento de recibir la maquinaria encargada de la PHD, indicaron que «la idea es que esté firme para la llegada de la máquina y para el movimiento necesario». Es menester recordar que la máquina especializada en este trabajo está abocada a la obra del Gasoducto Néstor Kirchner, la cual es considerada una prioridad, teniendo en cuenta la magnitud y alcance nacional.
Al consultar al Enerfe cuándo se espera que llegue la máquina, la respuesta aún no tiene precisión: «Lo importante es que esté para cuando se solicite, es una máquina que no para nunca de moverse por el país», señalaron.
¿Habrá cruce este año?
Si bien el INA prevé que el río Paraná en estas latitudes tenga un descenso para las próximas semanas, ya que se espera que el nivel baje hasta los 2,61 metros para la primera semana de junio, la incertidumbre se genera en si este nivel alcanzará a que el terraplén cumpla su función y la obra de perforación se haga en el momento preciso, lo cual aún no está confirmado de forma oficial.
Más allá de lo que pase en el corto plazo, este año se avizora que las condiciones de bajante del río no regresen y, por el contrario, el horizonte traería crecidas de los cursos de agua de la gran Cuenca del Plata. Esta teoría se sustenta ya que el fenómeno del Niño se encuentra en la actualidad en su fase neutral.
En este sentido, los especialistas advierten que hay un «62% de probabilidad de desarrollo de una fase Niño» durante el trimestre mayo-junio-julio, de acuerdo a los modelos dinámicos y estadísticos. Además, «las chances de Niño se mantienen altas durante todo el otoño e invierno», indica un informe dado a conocer por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) y por el INA. Ante estas condiciones previstas, el panorama que se analiza deja más dudas que certezas sobre si será posible cruzar debajo de la laguna los 1.850 metros que superan Monte Vera con Rincón en el corto y mediano plazo.
