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“La idea es brindar herramientas para los que quieran emprender y trabajar”

La secretaria de Innovación y Desarrollo Económico del Municipio, María Victoria Nagel, explicó las acciones, sustentos y propósitos del área a su cargo.

El armado de un gabinete y la selección del perfil de los secretarios, están íntimamente ligados a los ejes y propósitos de una gestión y al modelo de ciudad que lo sustenta. En la campaña electoral que lo llevó a ocupar la intendencia con el apoyo mayoritario de los vecinos, Rodrigo Müller propuso una Esperanza con un desarrollo económico sostenible, respetuosa del ambiente, con oportunidades para todos, aprovechando la sinergia de varios factores: nuestras empresas, el potencial del campo, la cultura del trabajo característica de nuestra zona y el entramado científico tecnológico.

Para eso se transformó la antigua Secretaría de Producción en la Secretaría de Innovación y Desarrollo Económico, a cargo de María Victoria Nagel. La joven funcionaria es Magíster en Gestión de la Innovación Empresarial (Universidad de Barcelona), Licenciada en Administración (UNL), Especialista en Vinculación y Gestión Tecnológica, docente y consultora. En la actividad privada, es fundadora de INFIRA S.A, startup biotecnológica dedicada al desarrollo de cultivos perennes para una agricultura sostenible.

¿Qué áreas abarca la secretaría? ¿Cuáles son las principales líneas de trabajo?

“Nuestra secretaría trata de promover la producción, el consumo, el comercio, el empleo, es decir, todo lo que mueve la economía de la ciudad. Que haya más industrias y que produzcan más, vendan más y empleen más gente”.

¿Qué puede hacer el municipio para favorecer el desarrollo económico de la ciudad?

“Una forma de ayudar es capacitando a la gente. Después trabajamos en conjunto con la Secretaría de Hacienda en la nueva ordenanza tributaria, para promover áreas como el turismo. Necesitamos más plazas hoteleras. Para incentivar eso, les hicimos una reducción de impuestos y tasas. También impulsamos exenciones y desgravaciones a empresas exportadoras e incubadas”.

¿Qué resultados se están obteniendo con la incubadora de empresas?

“Este año entraron en pre-incubación diecisiete proyectos de treinta y dos que se anotaron. Es la primera vez que tenemos tantos. Lo bueno es que están enfocados en economía del conocimiento y economía circular y son proyectos bien innovadores. Algunos tienen que ver con nuevos materiales para la construcción, reutilización de residuos, plataformas de e-learning, enseñanza digital, alimentos deshidratados o premezclas para población con restricciones de consumo. Tenemos un gran equipo de doctores en química, biotecnólogos, diseñadores industriales, que están llevando adelante estas ideas. Lo importante es que, si algún proyecto no prospera, esa persona ya aprendió cómo es ser emprendedor y adquirió herramientas básicas para testear la próxima idea que se le ocurra. Eso es lo valioso de la pre-incubación”.  

¿Cómo es el perfil de gente que presenta esos proyectos?

“A nivel mundial, el promedio de edad de los emprendedores está arriba de los 40. En el mundo es así. Después de tu primer trabajo en general se te ocurre emprender. Es gente que se cansó de trabajar en relación de dependencia, o lo despidieron de su trabajo, o vieron cosas que pueden hacer, resolver y proponer. Pero nosotros en la pre-incubadora también tenemos gente más joven, entre los veintipico y los treinta y pico, que están en los últimos años de su carrera universitaria o terciaria y también quieren emprender. Aparte de esos diecisiete proyectos en pre-incubación, tenemos ocho más avanzados en incubación. Algunos hicieron sus primeras ventas. Queremos potenciar la incubadora. Por eso estamos haciendo una fuerte inversión en infraestructura. Hicimos el arreglo de techos y la instalación de gas. Construiremos nuevos boxes, laboratorios, baño y cocina, para que tengan todas las comodidades”.

¿Hay un proyecto con la Fundación Bloomberg para agilizar trámites para la radicación de empresas? ¿En qué consiste?

“Sí.  Es una fundación filantrópica internacional que apoya a ciudades para que innoven. Y ofrecen herramientas para simplificar trámites de habilitación de negocios o empresas, algo que nosotros estamos necesitando. Venimos trabajando con las demás secretarías para que los trámites de habilitación demoren lo menos posible. Por ejemplo, revisando expedientes en paralelo, para acortar caminos. Pero si logramos apoyo de la Fundación Bloomberg ganaríamos tiempo, realizando todo el trámite de manera digital”.

Innovación y vinculación: el rol del sector público para promover el desarrollo económico

¿De qué hablamos cuando hablamos de innovación?

“La innovación tiene mucho de vinculación. A veces las cosas están, pero no están conectadas. Nosotros tratamos de ayudar para que las empresas tengan todas las herramientas necesarias para innovar. Por ejemplo, el recurso humano. A través de nuestra oficina de empleo, yo puedo detectar qué están buscando las empresas y cuáles son los perfiles más buscados. Si no los tengo en el listado de inscriptos de gente desempleada, puedo empezar a formar o puedo hablar con el ITEC para que formemos gente en esos temas. No podemos hablar de transformación digital en la industria si no tenemos gente que sepa de digitalización. Entonces, si tenemos la carrera de desarrollo de software en el ITEC, después vemos cómo se puede completar esa formación, o hacerla más específica. Otro ejemplo: hoy las máquinas agrícolas son todas computarizadas. Hay que formar gente que sepa manejarlas. Y lo estamos haciendo mediante un convenio con la empresa Remonda Castro. Entonces, innovar, muchas veces es conectar distintos puntos. Y eso lo tenemos que hacer desde el sector público”.

¿En ese círculo virtuoso entre producción, educación, ciencia, tecnología e innovación, cuáles son las ventajas comparativas que tiene Esperanza?

“Esperanza, Rafaela, Rosario, son identificadas como ciudades productivas, industriales. Pero queremos levantar la vara. Tenemos dos facultades de la UNL, dos centros de investigación del CONICET, el ITEC, el Centro Tecnológico de la Cámara de Industriales Metalúrgicos, ALECoL, instituciones que hacen análisis o desarrollos tecnológicos. Tenemos que lograr que más gente los conozca y les pidan servicios. Nadie pide lo que desconoce”.

La ciudad también tiene un Polo Tecnológico… ¿Qué están haciendo ahí?

“Estamos abocados a fortalecer la institucionalidad del Polo Tecnológico. Necesitamos tener la personería jurídica para funcionar como asociación civil y empezar a prestar servicios a las empresas, entre otros, desarrollo de software, automatización de plantas, laboratorio de diseño o materiales, cosas que una pyme no puede cargarse a su propia estructura por el alto costo”.

¿Cómo está funcionando el área industrial? ¿Qué expectativas tienen?

“Para nosotros el área industrial se tiene que llenar de empresas. Queremos que esté densamente ocupada. Que la gente ingrese todos los días a trabajar y prestar servicios, que entren y salgan camiones, que haya movimiento. Por eso apoyamos las obras de infraestructura como la conexión al gasoducto metropolitano y los desagües pluviales. Uno de los próximos pasos será proveer al área de buena conectividad, para que se cuente con todos los servicios que necesitan las empresas”.

¿Qué va a pasar con el proyecto de centro comercial a cielo abierto?

“Es un proyecto que se había elevado a Provincia en la gestión anterior. La Secretaría de Comercio nos pidió revisar ese documento. Tuvimos una reunión en junio de 2024 con UCOES y CICAE por ese tema. Pero no hay acuerdo entre las instituciones de las ocho manzanas que abarcaría el proyecto, en relación al tipo de veredas que se quieren construir. Después está el tema de las acciones de difusión. Nosotros creemos que hacer sorteos sólo en algunas fechas, no alcanza. Además, ¿por qué hacerlo sólo en el centro y no en barrios o avenidas donde la actividad comercial está más concentrada? Creemos que es necesario repensar los centros comerciales a cielo abierto, como lo hicieron Rafaela o Santa Fe”.

¿Qué acciones de apoyo implementaron desde la Secretaría para el sector rural?

“Trabajamos en articulación con la Sociedad Rural, CODETEA y el INTA en diferentes temas. Apoyamos a pequeños productores a través del Programa “Mi huerta”. En octubre repetiremos la Jornada de Tecnología para la Cadena Agroalimentaria, que fue un éxito el año pasado. Bajamos información y brindamos asesoramiento para que tamberos de la zona puedan acceder a los créditos BICE. Estaremos en Todo Láctea. La idea es que puedan participar todos los actores de la cadena: mostrar un equipo de frío, lo que hace la agencia local del INTA, las dos Facultades, nuestro dulce de leche, nuestros quesos, programas municipales como “Pulso-Tec” o “Primeras Exportaciones”. A veces sólo se trata de visibilizar”.

El intendente prometió trabajar por una ciudad inclusiva, con oportunidades para todos. ¿Cómo se ataca el problema del desempleo?

“El 65 % de la gente de 35 años o más que acude a la Oficina de Empleo buscando trabajo, no terminó la escuela secundaria. Es muy difícil insertarlos laboralmente. Lo primero que hacemos con la Secretaría de Desarrollo Humano, es tratar de que completen la escuela. Hoy se necesita mucha formación. Porque los equipos que se usan y los procesos productivos requieren mucho conocimiento. No digo que todos deban ser doctores, pero sí técnicos. Queremos ir acompañando y orientando a los jóvenes, para que en el futuro la inserción laboral les resulte más fácil”.

Sintetizando, si tuviéramos que definir el principal objetivo de la Secretaría de Innovación y Desarrollo Económico, ¿cuál sería?

“La idea es que, el que quiera emprender y trabajar, no tenga excusas para no hacerlo. Brindar todas las herramientas. Si alguien no sabe manejar una computadora, bueno, acá tiene el curso. Alguien no sabe calcular costos para exportar, bueno, te inscribimos en el programa “Primeras Exportaciones”. Si alguien quiere innovar y no tiene recursos, te hacemos un diagnóstico y te conectamos con la Universidad, el CONICET o una empresa que te pueden ayudar. Acá las puertas están abiertas. Cualquiera se puede acercar. Lo importante es que tengas ganas de trabajar”.

A modo de ejemplo y de balance, ¿podrías relatar algún caso testigo?

“Sí. Tiempo atrás nos enteramos que la empresa La Anónima estaba buscando proveedores para vender a todas las sucursales del país. Participamos de las reuniones técnicas, armamos la difusión, publicamos la información y postulamos a diez empresas que cumplían los requisitos. Los acompañamos el primer tramo y después siguieron solos. Hoy KOV Design, una empresa esperancina, distribuye sus productos por toda Argentina a través de venderle a La Anónima y da trabajo a unos quince empleados. Eso demuestra que cada gestión y cada granito de arena termina dando sus frutos”.