La acción ocurrió en la cancha de Sportivo Laguna Larga, a pocos kilómetros de la ciudad de Córdoba, donde en un partido amistoso a beneficio de la Fundación Sonrisas el jugador del momento, Paulo Dybala, tuvo que patear un tiro libro cerca del área.

El delantero de 23 años, figura de la Juventus de Italia, hizo el gol del fin de semana con «todos» en la barrera… Jugadores del equipo contrario, suplentes y hasta algunos aficionados que se sumaron para intentar impedir que el crack convierta, aunque fue inútil. Sólo faltó que atraviesen el «colectivo». Histórico.

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