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Los ladrones anduvieron activos, ingresaron en varias viviendas llevándose diversos elementos y al menos en otros tres hechos se apoderaron de bicicletas y una moto. No existen detenidos. En uno de los casos, harto de los ilícitos, la víctima se negó a recibir a la policía.

En Esperanza los amigos de lo ajeno siguen activos, a pesar que nada se informe desde la Unidad Regional XI. Esperemos que el nuevo jefe se maneje distinto a su antecesor, porque intentando esconder la realidad no logran nada, ya que los medios comprometidos con la sociedad reciben llamados de las víctimas y los ilícitos ven la luz.

En los últimos días hubo gran cantidad de robos y aquí reportamos sólo algunos para que tengan una idea de lo que realmente sucede sin que existan soluciones. Por ejemplo una mujer de apellido Fargnoli dijo que cerca de Súper Lorito le sustrajeron «un ciclomotor Zanella 70 color dorado con canasto».

La familia Giudicatti informó que le robaron la bicicleta de su casa cercana a la facultad. «Por favor si alguien la ve o se la ofrecen para vender que me avise, es nueva, fue un regalo esperado por mi hijo y está muy triste. Por favor pido su colaboración», expresó (es la imagen que compartimos).

Jonatan Fernández dio cuenta que le robaron la bicicleta a su hermana, «si alguien la ve me puede avisar» y aportó mayores detalles.

Casas y negocios

Una vivienda de Schneider al 1700 fue visitada por los cacos el sábado después de las 21:30, cuando los dueños salieron a cenar. De acuerdo a lo que pudimos averiguar, barretearon la puerta, dieron vuelta todo y se llevaron joyas y dinero en efectivo, pero para la Unidad Regional XI no existió, porque nunca lo dieron a conocer.

Con el lógico nerviosismo por la situación, los propietarios se negaron a conversar con la policía departamental y dijeron que harían llegar el reclamo al gobernador debido a la situación que atraviesa nuestra ciudad en materia de seguridad.

En Simón de Iriondo al 4100 intentaron entrar y no pudieron, arrancaron la reja y barretearon la puerta, pero huyeron sin llevarse nada, no se sabe si pasó alguien y decidieron abandonar el plan o qué aconteció.

También en Simón de Iriondo, en su intersección con 26 de Mayo, entraron a robar tras arrancar una reja del negocio que funciona en el lugar. Se llevaron la caja registradora. Llama la atención que hayan trabajado con tanta tranquilidad sobre una arteria muy transitada, porque se tomaron el tiempo para sacar, entera, la reja y recién ahí forzaron la ventana y pasaron al interior… ¿Y la policía?

Triste realidad

Apenas es una muestra de lo sucedido en pocos días, por lo que está claro que el desafío del nuevo jefe pasa por rodearse bien -cosa que no hizo Candia, que escuchó a varios que lo aconsejaron mal- y ajustar detalles de la prevención, que deja mucho que desear.