Envianos fotos, videos
o consultas:
3496 534414

Farmacéutico vivió una pesadilla a manos de los delincuentes

[huge_it_slider id=»345″]

Una verdadera noche de terror fue la que pasó un farmacéutico que reside en la localidad de Candioti, a manos de dos delincuentes que lo atacaron en su vivienda particular.

Alejandro Ferrarasi (31) fue maniatado y golpeado por rufianes que estaban armados y cubrían sus rostros con pañuelos del tipo árabe y bufandas.

La pesadilla que comenzó en la propiedad del profesional se extendió luego en el negocio, lugar donde los maleantes arribaron en el automóvil de la víctima, a quien tenían reducida en el asiento trasero del coche.

Tras algunos intentos fallidos para abrir la puerta del negocio el plan de los ladrones tuvo un inesperado giro: esto fue cuando escucharon (y vieron) que el patrullero del pueblo, encendió el motor para dar una recorrida.

Este detalle puso en fuga a los malvivientes, aunque derivó en un “paseo” obligado del comerciante, que luego fue abandonado en un descampado próximo a la planta del relleno sanitario, a la vera de la Circunvalación Oete, camino al centro de Santa Fe.

 

“Si suena la alarma sos boleta”

“Los lunes tenemos una peña con los muchachos del pueblo. Cerca de las 23 me retiro del bar, que está sobre la ruta, y me vine para mi casa. Ingreso por la galería y cuando apago las luces del auto, se me aparecen dos personas, que tapaban sus rostros con pañuelos o bufandas. Me dicen: ‘Quedate quieto’. Me tumban al suelo y me atan las manos con una soga. Me cubren la cabeza y me piden el código de la alarma. Me amenazaban diciendo que si sonaba me mataban. Ingresamos a la casa y ahí me hacen tirar al suelo, con la cabeza para abajo, y me atan también los pies”, dijo Alejandro.

‘¿Dónde está la plata? Nos pasaron un dato que tenés plata’, gritaban los rufianes y yo intentaba explicarles que acá no tengo plata, sólo lo de la billetera”, agregó.

“Comenzaron a requisar buscando dinero. Y ahí fue cuando empezaron los golpes. Me pegaban en la cabeza con la culata de un arma u otro elemento contundente. En un momento les digo que podía llegar a haber algo de plata en la farmacia. Entonces me dicen ‘vamos para allá’. Me suben a mi auto y así, maniatado y vendado, me tiran en el asiento de atrás”.

 

Patrullero oportuno

“Otra situación difícil fue cuando llegamos a la farmacia, porque no encontraban las llaves. Yo les explicaba que estaba junto a la palanca de cambios, pero ellos creían que los estaba chamuyando. En ese momento justo sale el patrullero de la Comisaría. Entonces los tipos es como que se asustaron. Comenzaron a decir ‘vamos, vamos que viene la cana!’”, contó.

“Luego vuelven a poner en marcha el auto y nos vamos. Agarran ruta 11 y luego la circunvalación. Iban a toda velocidad y con la música al máximo volumen. En una parte disminuyen la velocidad y se meten por un camino hacia el lado del río Salado. Me hacen bajar a los empujones. Camino unos metros y me dicen ‘nos llevamos el auto’ (un Nissan Tiida)”.

El vehículo propiedad de la víctima fue hallado incendiado en un descampado ubicado en 12 de Infantería al 6500

 

Pidieron disculpas

Pero antes de finalizar esta historia guardaba un capítulo insólito. “Al momento de irse uno de los tipos se me acerca y me dice ‘disculpá por la changa que te hicimos comer’”, comentó Alejandro.

“Cuando siento que se va el auto comienzo a desatarme. Me levanto perdido entre los pastizales y rodeado de bolsas de basura. Me incorporo y trato de ubicarme. Lo primero que veo es la ruta y camino para allí. Después caminé como pude (hice señas a los autos y colectivos, pero nadie paró) hasta que llegué a la dependencia policial, en la rotonda del hipódromo”, recordó.

 

Descontrol

El martes por la mañana, aun bajo el shock por los momentos vividos, Alejandro tuvo lugar para una reflexión. “Todo esto te deja muy mal. Acá la situación se está descontrolando. Tuvimos tres robos en 9 días. Primero fue una familia que vive en el campo y después un muchacho que le entraron a robar cuando fue a visitar a su novia. No sé cómo sigue esto”, sentenció.