Echaron de un pueblo de Las Colonias a un futbolista “por volver en plena cuarentena”

Si bien la pandemia de coronavirus despertó el perfil más solidario de millones de personas en el mundo, también expuso actitudes cuestionables. Y una de esas fue la que le tocó padecer en carne propia a Marcos Fernández, jugador de San Martín de San Juan, quien sufrió una incómoda situación en su pueblo natal.

Aprovechando el permiso que implementó el Estado nacional, que permite que las personas que quedaron varadas dentro del país regresen a sus domicilios para continuar con el aislamiento, el ex volante de Colón decidió retornar a Matilde, en el Departamento Las Colonias. Sin embargo, se encontró con un recibimiento que no esperaba. Según relató en sus redes sociales, a los pocos días lo obligaron a abandonar su pueblo porque estaban en desacuerdo con su vuelta en plena cuarentena, pese a que contaba con la habilitación del gobierno.

"Tristemente nos encontramos con gente a la cual no le cayó bien que yo pudiera volver, y se encargó por completo de sacarme (o mejor dicho echarme). Y digo tristemente porque hicieron hasta lo imposible para que fuera así", comentó Fernández con tristeza.

"Cuando llegás al punto de hacer hasta lo imposible para querer lastimar a otra persona, es donde te das cuenta de lo triste que deben ser estas personas. La sensación fea que deben sentir al querer y lograr que una persona del pueblo (donde nos conocemos todos) tenga que irse del mismo", continuó.

Además, agregó: "Con esto no quiero mostrar nada más que una sensación de rechazo para estas personas que lograron su propósito. En el cual se meten en la vida de los demás sin conocimiento de nada y quieren lastimar de alguna manera, cosa que en una familia tan unida como la mía, es y va a ser imposible lastimarnos o causarnos daño".

En diálogo con diario El Urbano de San Carlos, el futbolista oriundo de Las Colonias manifestó que la orden de que se retire del domicilio de su familia provino de la comuna local. Además relató que la policía le dijo que, si no seguía la disposición, lo iban a arrestar, entonces decidió irse con su pareja e hijo a la ciudad de Santa Fe, en donde se encuentra actualmente.