Realizaban usura en toda la región luego de otorgar préstamos con intereses incobrables. Las víctimas eran amenazadas y despojadas de sus bienes. Entre ellas hay personas del Departamento Las Colonias. Todos los detalles.
El juez penal de primera instancia, Pablo Busaniche, deberá resolver en los próximos cinco días el acuerdo abreviado que cerraron ocho integrantes de las distintas bandas de prestamistas que a fines de diciembre del 2019 fueron desbaratadas en el marco de una megacausa que se tramitó en la Fiscalía de Delitos Complejos del Ministerio Público de la Acusación.
El flamante acuerdo establece penas de tres años en suspenso para ocho integrantes que en carácter de “miembros” formaban parte de siete violentas bandas que realizaban usura en Esperanza y la región luego de otorgar préstamos con intereses incobrables.
Las víctimas, al no poder afrontar el pago de tales “créditos” terminaron siendo despojadas de sus bienes. Incluso, en un caso particular una mujer llegó a quitarse la vida por no soportar las presiones que recibía al no poder hacer frente al pago de un préstamo que había sacado para poder mantener su despensa en barrio Guadalupe.
El juicio abreviado fue para los imputados Nicolás Forconi; Romina Astudillo, José Aguirre, Marcelo González, Franco Acevedo, Leonardo Barrientos, Walter Esquivel y Florencia Cáceres. Todos transitan la causa en libertad y una vez que salga la resolución del juez Busaniche deberán pagar multas que parten de los 25 mil y pueden llegar a los 50 mil pesos. En tanto, la Fiscalía y las respectivas defensas de los implicados cerraron una serie de “reglas de conductas” que tendrán cumplir una vez resuelta la sentencia condenatoria.
Por la causa ya acordaron penas de tres años en suspenso otras 17 personas que días después del desbarate, el 27 de diciembre, aceptaron los cargos que les achacaron las fiscales del caso, Mariela Jiménez y Laura Urquiza, y firmaron sus respectivos juicios abreviados.
Por la investigación se encuentran detenidos los cabecillas que tenían las bandas que fueron desbaratadas por el Organismo de Investigaciones (OI). Los cuales permanecen detenidos bajo la medida cautelar de prisión preventiva hasta tanto la causa avance a juicio.
La pesquisa tiene acusadas a más de 40 personas de haber participado de los delitos de “asociación ilícita”, la “coautoría de usura” y “coacciones” en perjuicio de distintas personas adquirieron préstamos fuera del circuito financiero y a tasas de cobro superiores a las del mercado.
Dichos préstamos eran otorgados por empresas ilegales y clandestinas que llevaban nombres de fantasía: “Belle Maison”; “El Patrón”; “Cipres”; “Créditos Santa Fe”; “Crediya”; “Prestamas” y “Prestocash”.
Víctimas de Las Colonias
En nuestra ciudad y el resto del Departamento hubo vecinos damnificados, algunos devolvieron el dinero abonando tasas que en determinados casos superaban el 40% mensual y otros la pasaron muy mal al verse enredados en esta maraña de irregularidades.
Una persona mayor de edad, muy conocida en Esperanza, entró en contacto casi involuntariamente con estos estafadores.
De acuerdo a lo que consta en el expediente, a pedido de un comerciante de Humboldt recibió mercadería y luego la trasladó a un domicilio de la capital provincial, tarea para la que contó con la ayuda de un vecino.
Días más tarde este ciudadano viviría horas de terror como consecuencia de ese viaje: dos sujetos golpearon la puerta y lo atacaron a empujones diciéndole “te vamos a matar a vos y a tu familia, hijo de mil put… Si no entregás la plata vas a aparecer en una bolsa negra… Te damos 24 horas para que consigas la guita”. Le aplicaron un fuerte golpe en el estómago y se retiraron.
Superado el temor, la víctima del apriete habló con su contacto en Humboldt para tratar de encontrar respuestas y descubrió que horas antes este hombre había sido golpeado en Santa Fe por los mismos “personajes”, quienes también le exigieron el dinero de la mercadería.
Planteadas de esta forma las cosas, lleno de miedo el esperancino huyó a la casa de un familiar en otra ciudad y radicó la correspondiente denuncia.
Todo se desmadró porque la mujer que recibió la mercadería en un edificio de la calle Pedro Vittori habría “mejicaneado” a parte de esta peligrosa banda, que no sólo se dedicaba al préstamo de dinero de manera poco convencional, sino que literalmente “esas personas andaban en todas.
Detenciones en Esperanza
No terminó ahí la odisea, porque al no poder ubicar a quien condujo el vehículo con la mercadería empezaron a apretar al amigo que lo había acompañado.
Es más, quisieron pasar de las palabras a los hechos, por eso volvieron a esta ciudad, más precisamente a la zona de los monoblocks ubicados entre calles Mitre, Janssen, Lehmann y Aarón Castellanos.
Lo que nunca imaginaron es que la policía estaba al tanto de todo, por eso apenas pisaron el lugar para “ajusticiar” a su nueva víctima varios efectivos de la ex PDI (hoy Agencia de Investigación Criminal) se les fueron encima a estos delincuentes poniéndole fin a tanta locura.