La excelente elección que tuvo Andrea Martínez, más los votos de Miguel Cassani que con el Partido FE compitió dentro de la interna, le permitió a Cambiemos superar al Frente Progresista y al Justicialismo.
Cambiemos acumuló 6.691 votos, segunda se ubicó la coalición que gobierna la provincia, que tuvo cuatro listas lideradas por Grenón, Baronetti, Erbetta y Bogao, sumando 6.404 sufragios, y tercero Nuevo Espacio Santafesino, el Frente Justicialista que tuvo como único candidato a Víctor Elena, con 6.015.
Como se observa, el electorado se dividió casi en tres partes iguales, aunque está claro que los votos de las listas que compitieron en la interna nunca se suman de manera lineal hacia quien ganó en ese sector, ya que siempre «quedan heridos» o los ciudadanos no están conformes con quienes lideran la propuesta y terminan votando a otro partido.
Por este motivo, a simple vista el que más complicado está es el Frente Progresista, que deberá trabajar mucho para no perder adhesiones de ninguna de las cuatro listas que presentó en las PASO.
De todas maneras, con esta paridad, se vienen dos meses a pleno en materia política, con campañas que no descansarán, porque todo indica que en las generales la pelea será voto a voto, el que no lo entienda así y «se duerma» pagará las consecuencias, ya que estarán en juego nada más y nada menos que cuatro bancas, la antesala de la pelea mayor en apenas dos años, donde tendremos que elegir intendente y senador.