La tarea ad honorem de estos servidores públicos va mucho más allá de acudir a un incendio o a un siniestro vial y un ejemplo de lo que decimos sucedió en la tarde noche de ayer, cuando fueron convocados para rescatar a una perra labradora que había caído en el zanjón de Avenida Argentina al 1600.

Una dotación completa con seis hombres acudió rápido ante el llamado y debió esforzarse al máximo para poder salvar a la infortunada perrita porque el lugar no les permitió moverse con tranquilidad.

Fueron varios minutos donde los bomberos actuaron una vez más con profesionalismo y amor por lo que hacen, situación que evitó que la labradora muera en el lugar.

Después del susto por los momentos de tensión, el can se encariñó con sus salvadores y recuperó “la libertad” luego de la travesura de seguir a una presa, lo que derivó en que caiga al profundo canal.

Destacamos la labor de Bomberos Voluntarios, porque piense un minuto que mientras a lo mejor estaban en su domicilio disfrutando de la familia o del fútbol de AFA no dudaron en salir “a mil” rumbo al Cuartel, se calzaron el buzo protector y trabajaron largo tiempo en un canal con el objetivo de salvar a una perrita… Lo reiteramos, por su alguien todavía no lo tiene claro: ninguno de los integrantes del Cuerpo Activo cobra siquiera un peso como retribución, todo lo que hacen estos servidores es realizado de puro altruista que son.