Una ingrata sorpresa se llevaron anoche los miembros de una familia que vive en Schneider al 1600, ya que escucharon ruido en el interior de la vivienda y descubrieron a un sujeto que había ingresado con intenciones de robo.
Fue la hija de Adrián Iníguez quien se percató del hecho y vio al delincuente huyendo por el fondo.
Segundos después comprobaron que el desconocido abandonó la casa con algo de dinero en efectivo que alcanzó a robar, pero no pudo llevarse otras cosas.
Por etas horas la policía intenta aclarar el ilícito.