Desde el jueves 5 al 11 de septiembre se llevó a cabo en Kazán, Rusia, la Academia Internacional de Líderes Voluntarios (FVLA) organizada por la Federación Internacional de Deporte Universitario (FISU).
Se trata de un evento educativo que funciona como parte clave del deporte internacional y del movimiento del voluntariado. En la academia, jóvenes líderes recibieron un intenso programa que incluyó lecturas, rondas de discusiones y oportunidades para la creación de redes que incrementan sus oportunidades.
Argentina dijo presente por tercera vez y en esta ocasión lo hizo a través de la esperancina Sofía Berrio, jugadora de waterpolo y representante de la Universidad Nacional de Cordoba (UNC) junto a Luz Pisani, estudiante y deportista de la Universidad de Buenos Aires (UBA), además de integrante de la Selección Argentina Universitaria de Taekwondo.
Además, desde la Federación de Deporte Universitario Argentino, Leilén Perez Diez también estuvo en Kazán capacitándose, pensando en el mundial de Rugby Sevens La Plata 2020 que hospedará Argentina.
Las representantes organizarán en diciembre la tercera Academia Nacional de Líderes Voluntarios 2019 en Tandil, Buenos Aires
Sobre Sofía Berrio
La joven esperancina es deportista desde muy pequeña, fue campeona provincial en gimnasia deportiva, integró la Selección Argentina de Waterpolo y ahora estudia en la Universidad Nacional de Córdoba (UNC).
Compartimos una entrevista realizada por la Federación de Deporte Universitario Argentino:
- ¿Cómo llegás a la Academia Nacional de Líderes Voluntarios?
- Es medio gracioso. Tengo una hermana melliza que estudia en la Universidad Provincial de Córdoba (UPC) y somos muy activas. A ella le preguntaron si quería ir, entonces me contó a mí que la academia iba a ser en la UNC, donde yo estudio. Así que moví cielo y tierra y llegué, no sé ni cómo, pero me pude inscribir.
- ¿Qué opinás sobre el deporte universitario?
- Creo que es algo súper importante a lo que hay que darle más valor y más difusión porque los chicos arrancan la carrera y dejan de hacer deporte para ir a estudiar, entonces en esos cuatro o cinco años se les corta la vida. Tienen que dejar todo para enfocarse en el estudio y es cuando más necesitan el deporte, ya sea a nivel elite o recreativo. Es muy bueno porque literalmente vivís más. Es difícil organizarse y todo, pero vale la pena mil veces, te da otra energía.