Los hermanos más conocidos de la ciudad, y no precisamente por su buena conducta, fueron detenidos por la policía de la Unidad Regional XI este miércoles.
Lautaro Amaya y su mellizo “Caracortada” tenían pedidos de captura emitidos por la Fiscalía, por los cuáles ante la requisa de los efectivos fueron a parar a Comisaría Primera.
El primero cayó por la tarde temprano en medio de tareas preventivas del Comando Radioeléctrico, mientras que el otro fue aprehendido gracias al trabajo de la Brigada Motorizada cuando caía el sol.
Ambos quedaron a disposición de la Justicia y lamentablemente al igual que en otros casos hasta los mismos policías tienen pocas esperanzas de que queden “guardados” debido a la legislación vigente.
¿Cambiarán los senadores y diputados algún día el Código Penal que ampara a los delincuentes o las fuerzas de seguridad seguirán llevando “de paseo” a los delincuentes recurrentemente?
