"Soy inocente, amo a mis hijos, estuve 20 años casado con la madre de mis hijos y jamás tuve un problema de este tipo que me está pasando. Esto está todo armado por la mamá de Lourdes", dijo "el Tata" Baldomir.
"Esto empezó en octubre de 2016 cuando ella me pidió alimentos para mis hijos, me mandó una carta documento pidiendo 5.000 pesos. Yo había dejado una cuenta en Estados Unidos para ella y que serviría para los alimentos de los chicos. Me encuentro con que esa cuenta estaba en cero. Y cuando reclamé, empezó con esta historia", señaló apuntando a su ex mujer, de quien dijo que "es muy mala, la conozco bien y siempre anduvo en brujerías y cosas raras", señaló Baldomir.
"Estoy mal"
Desde la cárcel, Baldomir dijo que "nunca estuve tan mal como ahora, pero con mis hijos me llevo bien. Mi hija fue de vacaciones hasta el mismo 2016. Tengo un mensaje de ella, de Lourdes, cuando cumplí diez años de la conquista del título, agradeciéndome por todo lo que hice por ellos. Eso lo tengo escrito por Lourdes, que ahora me acusa".
Luego habló del procedimiento en sí y dijo que "la Cámara Gesell se hizo en la defensoría del pueblo, de ahí no salió ningún informe. De parte de ellos, tienen un perito que dice que lo que dice la víctima es verdad. Nosotros tenemos cuatro informes de la Cámara Gesell, uno de Junín, otro de Buenos Aires y dos de Santa Fe. Esos informes no se leyeron, recién se leerán en el juicio. José y Carlos junior declararon que a ellos nunca les hice nada. Pregunté por qué no la llaman a Florencia, mi primera hija. Y me dijo el fiscal que tenía más de dos años para llamarla. Se está llevando por la denuncia. Yo creo en la Justicia de Santa Fe, no estoy en contra de nadie, pero no se hicieron bien las cosas", señaló el ex campeón del mundo.
Los amigos del campeón
Luego dijo que quiere ir a juicio para demostrar que es inocente y tras señalar que "los amigos del campeón ya no están. Cuando era campeón, mi casa se llenaba de gente y ahora son pocos los que vienen acá", contó algunas cosas de su vida en la cárcel.
"Creo mucho en Dios, leo la Biblia, he peleado cuatro o cinco veces, me quisieron probar porque fui boxeador y campeón del mundo. Me mandaron a lugares donde hay ratas y no se puede pasar un día. Es feo entrar a un penal por abuso, te discriminan. Están los choros y los drogadictos, y te discriminan. Yo estoy con todos los que están acusados por abuso, pero nos cruzamos con los de los otros pabellones y te gritan cosas cuando vas a la enfermería o a la farmacia. Eso es muy feo", explicó.
"Jamás en mi vida pensé que iba a estar en un penal. Vine acá en el 2006 cuando era campeón, a visitar a los que estaban adentro. Encontré varios amigos pero nunca pensé que iba a estar acá, siempre anduve por derecha. Pero la vida a veces te sorprende. Quiero ir a juicio para demostrar mi inocencia. Ésta es la pelea más dura de mi vida, pero la voy a ganar", concluyó.